Por qué parí en casa...
Hoy se celebra el Día Internacional del Parto en Casa y para celebrarlo comparto 11 de las varias razones por las que yo me convencí.
1. Mi escenario. Estar en mi propio territorio. Preparar el ambiente desde que tomé la decisión. Ponerle mi energía, hacer el altar de parto. Tener mis cuerdas y pelotas, y demás elementos a mi favor.
2. Mis bacterias. La primera colonia de bacterias es familiar. Es el ambiente donde estaremos a salvo.
3. Mi comodidad. Puedo parir dónde y cómo quiero. Libertad de movimiento. Puedo sobre llevar todo a mi ritmo y en paz ¡Estoy en Casa! Estadísticas indican que las mujeres que dan a luz en sus casas tienen menor riesgo de intervenciones. Estás en tu cueva, cómoda y segura.
4. Mi tribu. Pueden estar tantas personas como yo quiera, permita y necesite. En muchos hospitales ponen límite de 1 persona. Además puedo involucrar a mi hijo mayor.
5. Mi bebé. Apego inmediato, contacto piel con piel, tetica, miradas, impronta, oxitocina a borbotones. El inicio de una historia de amor. Una de las cosas que más temía era que se llevaran a mi bebé lejos de mi y no pudiera darle en esa primera hora de vida dorada todo lo que yo deseaba y mi bebé necesitaba. Esta primera hora marca un impacto en su forma de llegar al mundo y recibirlo. Yo quería que su bienvenida fuera libre de violencia. A su ritmo, sin intervenciones, sin medicalización, sin protocolos inhumanos. Quería cortar el cordón cuando dejara de latir. No quería luz blanca ni que lo pesaran en pesas frías, o que lo tomaran por los pies y lo nalgueran, que lo aspiraran y limpiaran. No quería vitamina K inyectada ni gotas en los ojos. Quería su vernix fundido en mi piel, quería su olor puro. Quería hacerle sentir que el mundo es un lugar hermoso para vivir.
6. Mi libertad. Puedo poner la música que desee, encender las velas, inciensos, sentirme en libertad y ser la mamífera que quiero. Gritar, gemir, sentir a mi manera.
7. Mi victoria. La experiencia es increíble. Te sientes una diosa... y por eso las mujeres que tienen partos positivos tienen un mayor indicador de éxito en la lactancia y no padecen depresiones post parto.
8. Mi lactancia. La lactancia se ve muy favorecida por las circunstancias que propician muchísima oxitocina beneficiando el establecimiento de la LM.
9. Mi placenta. Puedo quedarme con la placenta para hacer medicina. En muchos hospitales la consideran todavía como un desecho biológico desperdiciando en ella un montón de nutrientes que ayudarán de forma excepcional a la recuperación. Sin olvidarse de su aporte energético.
10. Mi tranquilidad. No tengo que moverme de casa. No tengo que preocuparme por nada. Estoy protegida.
11. Mi historia. Y esta creo es la razón más importante. Es MI momento. Soy protagonista junto con mi bebé. Tenemos la oportunidad de hacerlo diferente para poder recuperar la esencia de la vida, que es amar y respetar ¡Por eso dicen que el parto en casa es el parto respetado por excelencia! Al cambiar la forma de nacer, dice Michel Odent que podemos cambiar el mundo, y yo creo que es sí porque podemos crear esa causa en la historia de la humanidad; una causa de redención de la pureza del nacimiento; estamos hablando de seres humanos que nacen libres de violencia, en un nuevo contexto, que aunque parezca retrógrado para muchos ignorantes, se trata de una evolución hacia la confianza, el amor y la sanación del colectivo que ha subestimado la forma en la que podemos dar a luz. ¡Feliz parto en casa a todas las tribus! Infórmate bien y defiende tu parto. ¿Y tú por qué pariste en casa? (Las leo🤓)